Loly López Guerrero
domingo, 9 de noviembre de 2025
Recital de Poesía
sábado, 1 de noviembre de 2025
Jean Claude Nicolás Forestier
Jean
Claude Nicolas Forestier
UNOS JARDINES CON ENCANTO
Jean
Claude Nicolas Forestier
Cuando la
familia Alpériz, formada por Manuel Alpériz Bustamante y Juana González
Morales, invitó a su Palacio a la familia Forestier, no imaginó las
consecuencias que aquella visita tendría.
Charles
Forestier y Marie Lousie de la Forest Divonne, vinieron acompañados por su hijo
Jean Claude Nicolás Forestier, que era arquitecto paisajista.
Quedaron
encantados con la arquitectura neomudéjar del edificio y el olor de los
naranjos que rodeaban el Palacio.
Habían
venido a conocer la Semana Santa de Sevilla, de la que tanto les hablaban el
matrimonio Alpériz. Así que se iban por la mañana a ver las procesiones y cuando
se cansaban iban a descansar y a almorzar a la casa que tenía la familia
Alpériz en Plaza Nueva.
Una vez
que terminó la Semana Santa el matrimonio se marchó a París, pero su hijo le
pidió permiso a la familia Alpériz para quedarse, ya que quería conocer la
Feria de Sevilla de la que tanto les habían hablado Manuel Alpériz y su esposa
Rosario Cordón.
Jean
Claude, al que las criadas comenzaron a llamarle «Juanito» y de apodo el
«franchute», se quejaba de que después de almorzar todas las personas del
Palacio desaparecían. Simplemente iban a dormir la siesta, a la que él se
aficionó rápidamente para paliar los rigores del calor.
Con su
amigo Manuel conoció los jardines del palacio de San Telmo, de la Buhaira, del
Alcázar, también viajó a Córdoba y a Granada.
Un día le
propuso a doña Juana que por qué no hacía unos jardines modernos delante del
Palacio. Le dijo que le haría un boceto de cómo serían y así lo hizo. Al
matrimonio le gustó, doña Juana le pidió que le hiciera un monumento para
homenajear a su escritor favorito, Miguel de Cervantes Saavedra.
Pronto
comenzaron las obras, los azulejos que utilizaron en los bancos fueron
fabricados en Triana por la empresa Mensaque Hermanos y Cía., y pintados por
Manuel Arellanos Campos, la misma empresa donde compraron todos los azulejos
del interior del Palacio.
Los
jardines se transformaban gradualmente, revelando sus encantos. Al fondo, un
lago reflejaba la silueta de dos cisnes que nadaban juntos. Pavos reales,
fuentes y bancos invitaban a pasear y a descansar bajo la sombra de los diferentes
árboles variados: palmeras, olmos, árbol de judas, plataneras, ficus y
jacarandas.
El aire
se impregnaba del aroma de las flores: geranios, jazmines, rosas y dama de
noche. A doña Juana le cautivó el banco que homenajeaba la novela: El Quijote
de la Mancha, con pasajes grabados y un azulejo con el rostro del gran
escritor. Allí pasaba largas horas leyendo, acompañada por el susurro de la
fuente.
Forestier
de vez en cuando viajaba a París a cumplir con sus obligaciones, ya que ejercía
como conservador del Bosque de Boulogne de París, para comprobar las obras de
jardinería que se estaban realizando, pero pronto volvía a Dos Hermanas donde
muchos amigos de la familia Alpériz les encargaron que les diseñara los
jardines de sus haciendas.
Un día su
amigo Manuel le contó que se iba a hacer una exposición en Sevilla y que
querían construir una zona con unos jardines diferentes a todos los que estaban
situados en la ciudad. Forestier presentó un proyecto y para ello, entre otros
bocetos, utilizó como modelo el banco que hizo para homenajear a Miguel de
Cervantes en el Palacio de Alpériz, pero adornado con unos anaqueles para
colocar libros y descansar mientras se disfrutaba de una agradable lectura.
En ese
proyecto plasmó sus sueños de una Sevilla antigua y diversa, donde convivían lo
islámico y lo romántico, lo tradicional y lo moderno. Diseñó amplias avenidas
para pasear y disfrutar de la variedad de árboles y flores que perfumaban el
aire, invitando a volver. El agua era un elemento esencial en sus jardines, y
por eso creó fuentes con surtidores que fascinan con sus juegos de agua y reflejos
dorados del sol, y a veces se unen al arco iris.
Los
jardines del Parque de María Luisa se inauguraron el 18 de abril de 1914 para
deleite de las personas que asistieron a conocerlo y que quedaron
agradablemente sorprendidas de tanta belleza y que aún hoy nos sigue
deleitando.
A
Forestier también le encargaron la urbanización de la montaña de Montjuïc para
la Exposición Internacional de Barcelona de 1929.
Forestier
no tenía más remedio que volver a París de vez en cuando, pero pasó muchos años
en nuestra tierra. Realizó varios proyectos en Andalucía, además del parque de
María Luisa: el jardín del Colegio Mayor de Santa María del Buen Aire en
Castilleja de Guzmán, el jardín del palacio de Moratalla de Hornachuelos en Córdoba,
los jardines del palacio del Rey Moro en Ronda.
Su
popularidad fue aumentando y pronto tuvo ofertas para trabajar en el Parque
Ascensión en Badajoz, el Palacio de Liria en Madrid, en los jardines del
palacio de la Magdalena en Santander y el jardín de Ángel Pérez en Valdenoja,
Santander.
En
Barcelona además de la montaña de Montjuïc realizó el jardín de la fundación
Julio Muñoz Ramonet y el jardín de la plaza de Armas en el Parque de la
Ciudadela y el Parque de Guinardó, y no podemos olvidar sus trabajos en
Marraket y en grandes ciudades latinoamericanas: Buenos Aires, La Habana y
otros lugares de Cuba.
Sus
trabajos fueron reconocidos ya que en 1926 lo nombraron Oficial de la Legión de
Honor en Francia y Comendador del Mérito Civil en España. En 1929 obtuvo el
Gran Premio por la Exposición Internacional de Barcelona. Fue cofundador de la
Sociedad Francesa de Arquitectos y Urbanistas.
Publicó
varios libros sobre los jardines y los parques. Falleció el 26 de octubre de
1930 en París a la edad de 69 años. Todo el mundo coincidió en decir de él,
«que fue un hombre de gran visión y espíritu abierto que admiraba profundamente
los jardines hispanomusulmanes». Forestier nunca se casó. Estaba enamorado de
su trabajo.
Hace poco
han restaurado la glorieta de Miguel de Cervantes, el banco que construyó para
homenajear a dicho escritor, se encuentra frente al Palacio Real en el parque
de María Luisa.
A ver si alguna
vez se puede restaurar el banco que hay en el Palacio de Alpériz, ya que sufre
el deterioro normal del tiempo pasado.
Sí,
gracias a la visita de los Forestier a Dos Hermanas, tuvimos la oportunidad de
conocer a un gran arquitecto paisajista que marcó un estilo en el diseño de hermosos
jardines en España.
Fue una
persona admirable que siempre recordaremos.
©Loly López Guerrero.
lunes, 27 de octubre de 2025
Plaza de la Constitución.
Plaza de la Constitución.
Esta plaza ha
cambiado de nombre varias veces, Plaza de Alfonso XII, Plaza Constitucional,
Alfonso XIII, Fermín Galán, Moreno Calvo, José Antonio Primo de Rivera, Y
actualmente Plaza de la Constitución.
En el siglo
XVI era conocida como la Plaza Pública, en la misma se encontraba el Ayuntamiento
que era una humilde casa de dos plantas cubierta de tejas. También se
encontraba la Iglesia, ambas instituciones representaban el poder civil y el religioso.
Antiguamente el
Mercado de Abastos estaba situado en esta plaza. Los puestos eran ambulantes. Mi
abuelo cuando vino a Dos Hermanas vendía en esta plaza verduras y castañas
pilongas, de ahí viene su apodo “ El Pilongo”.
En 1928 el alcalde Manuel Andrés Traver colocó la primera piedra en los terrenos del jerezano, conocida como la huerta del Pachocho, allí fue construida la nueva plaza de abastos.
El 19 de junio de 1932 el alcalde republicano Manuel Terrero Sánchez lo
inauguró.
En 1932 se demolió este mercado ya que se había construido uno nuevo en la Plaza del Emigrante. Por lo tanto, el aspecto que tiene actualmente hoy los jardines data de esa época.
En 1937 se acuerda la construcción de la fuente que ocupa la zona
central de la plaza. Los frontales de la fuente fueron adornados con las
cabezas de seis leones y de sus bocas manaba agua por un grifo. Esta agua era
potable y mucha gente iba a la plaza para abastecerse de ella.
Hay noticias
de las fiestas de los toros que se celebraban en esta plaza durante el siglo
XVII con motivo de las fiestas patronales de Santiago y Santa Ana.
En aquellos
años había pocas personas que supieran leer. existía la figura del pregonero
que anunciaba las noticias importantes del pueblo.
Entre los
jardines de la Plaza de la Constitución y la Plaza del Arenal era el paseo
obligado de los domingos y días de fiestas. ¡Cuántas suelas hemos gastado en
esos paseos!
En la plaza de
la Constitución hay un monumento que fue inaugurado el 16 de febrero de 1987
por los reyes de España. Juan Carlos I y Sofía. El monumento del rey fue obra
del escultor Jaime Gil Arévalo.
Hay muchas
personas que piensan que ese grupo de figuras representan a la familia real.
Ese día los reyes visitaron la iglesia de Santa Ana y la parroquia Santa María Magdalena.
En la iglesia de Santa Ana ocurrió una anécdota divertida. Cuando
invitaron a los reyes a visitar la cueva el rey dijo: Que baje la reina que yo
he bajado muchas veces. Los miembros de la junta de gobierno se miraron unos a
otros sin saber qué responder. Mientras unos le enseñaban a la reina la cueva
el rey les contó. Cuando vine a vivir a España, el general Franco cuando yo
tenía vacaciones me enviaba a casa de mi tía Lola, a Dos Hermanas y aquí pasé
todas mis vacaciones, en la Huerta la Princesa. Mi tía Lola era la camarera de
Santa Ana y los martes veníamos a traerles flores o ella la cambiada de ropa,
Mi primo Adán Carlos y Yo visitábamos la cueva y otras veces nos íbamos a los
jardines a jugar con los niños.
EL
AYUNTAMIENTO.
El primer ayuntamiento era una
sencilla casa de dos planta cubiertas de tejas, esta casa sería reformada en
1920. Querían que el edificio adquiriese más señorío para la exposición
universal que se celebraría en Sevilla en 1929. Se compró el edificio adyacente
para su ampliación.
Más tarde sería el arquitecto Juan Talavera quién diseñó un hermoso edificio de estilo andaluz que fue inaugurado en 1942. Hay que destacar el patio interior con columnas y sócalos de cerámica artísticas y balconadas.
En 1996 el edificio consistorial
cambió su fisonomía gracias a los arquitectos locales Rafael López y Daniel Conesa.
Su aspecto es el que tiene ahora.
miércoles, 18 de junio de 2025
Clausura comarcal de los talleres 2025
El día 17 de Junio hicimos la clausura de los talleres en el Palacio de Alpériz. asistieron los centros de Alcalá de Guadaira, El Coronil, Lebrija, Los Palacios, Utrera y Dos Hermanas. Comenzamos el acto que fue presentado por Loly López Guerrero.
Lo primero que ofreció el grupo de voluntarias/os de Dos Hermanas fue una breve presentación de su programa 123 Pasémoslo Bien, donde hicieron preguntas, respuestas y una actuación. El concurso fue presentado por Ani López Guerrero.
El público se animó a bailar. miércoles, 4 de junio de 2025
Cena fin de curso Palacio de Alpériz. 3 Junio 2025
El día 3 de Junio 2025 celebramos la cena fin de curso en el CPA Palacio de Alpériz. La velada estuvo amenizada por un grupo de músicos.
La cena la sirvió el Restaurante Mendizábal y estaba todo muy rico.
Os dejo fotos de esa noche.







































































